De garabatos infantiles a hermosas acuarelas
Si unes el talento artístico de una madre a la creatividad de su pequeña hija, logras un trabajo tan fantástico como el que realiza Ruth Oosterman.
Esta artista autodidacta canadiense utiliza los garabatos de su hija Eve (de tan sólo dos años) para dar vida a unas preciosas acuarelas, guiada por su creatividad y por lo que la pequeña Eve le cuenta que ha plasmado en sus garabatos.
Un excelente tandem que deja patente la sintonía entre madre e hija.
Visto en: FuriaMag Arts Magazine
Publicado el 09 octubre